SALTILLO, COAHUILA | 2 de Ene de 2014 - 5:56 PM | Por: Agencias
La temporada vacacional de Semana Santa estuvo a punto de cerrar con saldo blanco en incendios forestales, sin embargo, en el último dÃa, hacia las 12:30 horas se registro un siniestro en la cara norte de la Sierra de Zapalinamé.
Las blancas columnas de humo que emergieron de los cañones sugerÃan una gran afectación, se reportaron alrededor de 7 hectáreas consumidas de arbustos y matorrales.
La principal preocupación entre los combatientes fue contener las llamas para impedir que subieran hacia la cresta de la sierra, donde comienza la zona boscosa.
Al caer la noche se tenÃa una avance del 60 por ciento en el control del incendio forestal, para lo cual fueron necesarias 22 descargas de agua con producto quÃmico retardante, realizadas por el helicóptero de la Comisión Nacional Forestal (Conafor).
El helicóptero en dos horas realizó distintos viajes y en cada uno vaciaba mil 200 litros. La nave, recargó el lÃquido desde una pila ubicada a unos 200 metros de la calle Prolongación Otilio González, que permanentemente fue surtida por pipas de la Presidencia Municipal.
También se necesitó la colaboración de casi un centenar de brigadistas de la SecretarÃa del Medio Ambiente del Estado, Dirección de EcologÃa del Municipio, Profauna, Conafor y el Ejército mexicano.
Las labores fueron supervisadas por el propio gobernador Rubén Moreira Valdez, quien arribó a la zona de emergencia cerca de las 18:00 horas, junto con el alcalde Jericó Abramo Masso, y la secretaria del Medio Ambiente, Eglantina Canales Gutiérrez.
El Gobernador externó su desaliento porque el siniestro fue provocado por paseantes, aparentemente menores, que acamparon en el sitio donde inició el fuego ya que se encontraron vestigios de lo que pudo ser una fogata.
Además, cuando llegaron Bomberos y personal de Conafor, observaron que tres hombres corrÃan en dirección contraria al incendio. También notaron una casa de campaña que se incendiaba.
El incendio se esparció cerca de la torre de monitoreo de la Conafor, por lo que se tuvo una detección inmediata; sin embargo, las ráfagas de viento impidieron que se pudieran finiquitar las llamas a pesar que se les dedicaron más de nueve horas de trabajos conjuntos.
El difÃcil acceso en los cañones impidió a los brigadistas atacar al fuego en diferentes ángulos; por lo que se instaló un campamento con personal para vigilar el comportamiento de las llamas durante la noche, a la espera que el siniestro no se propague más.
Previo a este acontecimiento, en Coahuila sólo se habÃan registrado cinco incendios forestales en lo que va de 2013, mismos que consumieron un total de 24 hectáreas en Maderas del Carmen, Múzquiz y Ocampo. En la Sierra de Zapalinamé sólo se habÃan registrado conatos.
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